sábado, 3 de diciembre de 2016

Bizcocho en taza al microondas con papilla apto para BLW

Recientemente recibí un cargamento de papilla de 5 cereales para experimentar y promocionar, bajo el hashtag #VocesNestleBebe, las papillas de "la casa Nestlé", como diría mi padre.
 
La sorpresa fue mayúscula, ya que me apunto a muchos sorteos muy a la ligera, y ¡alguna vez hasta me tocan cositas! Acto seguido comencé a maquinar, ¿y qué hago yo con esto, si estoy haciendo BLW?
 
El BLW, baby led weaning, es la alimentación dirigida por el bebé, que se trata, en esencia, de que coma solito desde un principio, en trozos, pegotitos... por lo que las papillas pasan a la historia o bien se presentan de otra manera. Mi opción fue investigar un poco y comprobar que se puede sustituir la harina corriente de casi cualquier receta por los polvitos de papilla comercial y de este modo "enriquecemos" compotas, yogures, hacemos tortitas, galletas y bizcochitos como el de esta entrada.
 
En esta ocasión opté por adaptar el ya clásico bizcocho en taza al microondas, para hacer uno adaptado a mi pequeñaja. Un bizcocho, por otra parte, que está riquísimo y que podemos tomar también los adultos.
 
Mi taza de bizcocho, rico y esponjoso

 
Mi adaptación viene a ser la siguiente, que queda lista en dos minutos y medio en el microondas a máxima potencia. Yo hago la mezcla en una taza que previamente he untado hasta el borde con un poquito de aceite, para que no se peque mucho a las paredes.
 
  • Un huevo pequeño
  • Tres cucharadas de aceite (de girasol en mi caso, que no deja mucho sabor, pero puede ser de oliva)
  • Tres cucharadas de leche (mmm... no, no usé leche materna ni leche adaptada)
  • Tres cucharadas de papilla de 5 cereales.
  • Una cucharada de harina.
  • Una cucharadita de levadura en polvo
  • Cuatro dátiles hechos pasta (desmenuzados, picados, espachurrados...) para sustituir al azúcar.
 
Si eres adulto y te da lo mismo, puedes poner tus cuatro cucharadas de azúcar con total libertad. La verdad es que la papilla ya de por si es dulzona, de modo que tal vez incluso sea posible prescindir tanto de azúcar como de pasta de fruta.
 
Yo no lo he hecho, pero intuyo que esto mismo se podría hacer con papilla sin gluten (sólo con papilla, o con papilla y harina de arroz o maíz) de manera que quede apto para celíacos o para niños a los que no les hemos introducido el gluten.
 
Otra posibilidad es que no hayáis introducido el huevo, pero no hay problema: se puede sustituir por otras pocas cucharadas de leche.
 
 
 
Parte de un desayuno BLW, que no falte la frutilla cortada y su pedazo de bizcocho
 Reconozco que casi me gustó el bizcocho más a mi que a la peque, que estaba concentrada en su jugosa ciruela y en la mandarina. Pero, viendo el resultado, haré más veces este rico desayuno o merienda.